Steve Jobs
Steve
Jobs famoso empresario, conocido por sus grandes aportes al mundo
tecnológico, del cual todos disfrutamos hoy en día es de quien queremos
hablarte.
Sus
ideas han cambiado el mundo de la computación y la tecnología. Luego de afrontar serios problemas con los
directivos de la empresa Apple Computer
que el mismo fundó, Jobs fue irónicamente despedido, pero su espíritu
emprendedor lo llevó a crear una nueva empresa en la cual depositó todos sus
sueños.
Steve siempre se mantuvo abierto a todos los deseos y necesidades de
aprendizaje que su corazón le dictaba, decidió hasta atender a un curso de
caligrafía para aprender cómo se hacía.
Era sutilmente bello, histórico y artístico, de una forma que la ciencia no
puede capturar, y lo encontró fascinante. Nada de esto tenía ni la más mínima
esperanza de aplicación práctica en su vida. Pero diez años más tarde, cuando
estában diseñando el primer ordenador Macintosh, todo eso volvió a el.
Se encargó de diseñar Mac con eso en
su esencia. Fue el primer ordenador con tipografías bellas. Si Steve hubiera
ignorado sus instintos y deseos por entrar a aquél curso concreto en la
universidad, Mac jamás habría tenido múltiples tipografías, ni caracteres con
espaciado proporcional. Y como Windows no hizo más que copiar a Mac, es
probable que ningún ordenador personal los tuviera ahora.
Con este ejemplo nos aconseja que no nos desesperemos al comienzo, tenemos que confiar en que los puntos se conectarán
alguna vez en el futuro. Tenés que confiar en algo, tu instinto, el destino, la
vida, el karma, lo que sea, pero tenés que creerlo.
Luego comenzó a abrirse paso en el mundo, porque aún amaba lo que hacía. No
lo vió así entonces, pero resultó ser que el que lo echaran de Apple fue lo mejor
que jamás le pudo haber pasado
Como en todo
lo que tiene que ver con el corazón, Steve nos dice que lo sabremos cuando lo
hayamos encontrado. Y como en todas las relaciones geniales, las cosas mejoran
y mejoran según pasan los años. Así que seguí buscando lo que te apasiona hasta
que lo encontrés.
Durante los
últimos 33 años de su vida, cada mañana se ha mirado en el espejo y preguntado:
“Si hoy fuese el último día de mi vida, ¿querría hacer lo que voy a hacer hoy?”
Y si la respuesta era “No” durante demasiados días seguidos, sabía que
necesitaba cambiar algo.
No te dejés atrapar por el dogma que es vivir según los resultados del
pensamiento de otros.
No dejés que el ruido de las opiniones de los demás ahogue tu voz interior.
Y lo más importante, tené el coraje de seguir a tu corazón y tu intuición.
De algún modo ellos ya saben lo que tú realmente quieres ser.
Todo lo
demás es secundario.
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